Dias Extraños, Amigos Extraños.

Ese era el titulo de una pelicula bien chida con Ralph Fiennes. Lo cierto es que tambien mis dias son un poco asi, en la ultima semana paso las noches hablando por telefono, las mañanas trabajando, las tardes estudiando... No duermo mucho, pero no importa. La depresion se esta saliendo de mi sistema a pasos agigantados, estamos en plena campaña para ser autentificados como comite estudiantil (despues de años de hacer esas labores sin serlo) y organizando un ciclo de conferencias.

No cabe duda. La vida se porta relativamente bien conmigo, y tengo amigos fabulosos: Como el loco con el que intercambio mensajitos escritos por celular para narrarnos el beisbol; como la que nos hace collares de sopa a sus amigas en una mañana de locura; como los dos con los que hacemos bromas religiosas poli­ticamente incorrectas; como las tres pequeñas que son mis hijas nominales; como la hermana de mi exnovio que estudia informatica conmigo; como aquel que grita mi nombre dos veces cada vez que me saluda; como aquel con el que hablo por telefono dos o tres noches por semana hasta que casi nos amanecemos...

Estoy agotada, contenta y en marcha. Tengo un arti­culo por escribir, pero mis fuentes no cooperan mucho que digamos. Ya veremos que invento para mi entrega en 7 di­as!!